martes, 24 de mayo de 2016

Las aves del Retiro para empezar

Tanto si estás empezando, como si ya llevas un tiempo en este pequeño mundillo, deberás saber que de entre todos los sitios posibles en los que comenzar a observar aves, los parques urbanos tienen una peculiaridad, las aves están más acostumbradas al trasiego de personas y por tanto no desconfían demasiado. Esta característica permite observarlas detenidamente, con o sin prismáticos, apuntar sus comportamientos y lo más importante disfrutar de ellas. En este caso, el parque del retiro del centro de Madrid es un lugar idóneo para recorrer, aprender y descubrir la fauna que se mueve entre bancos y fuentes.

Aves del Retiro

Con este recorrido por las especies más comunes del Parque del Retiro se puede empezar a diferenciar especies únicamente atendiendo a unos pequeños detalles. Sumérgete en esta experiencia para descubrir un mundo que creías conocido, deja que las aves te sorprendan.

¿Y cuales son los trucos? ¿Tengo que compararme una guía? ¿Me tengo que aprender una lista de nombres? Lo primero es calma. No hay que saber todo desde el primer día, vamos a empezar poco a poco, ¿no? Una de las mejore recetas que hay para iniciarse en la observación de aves es la siguiente: fijarse siempre en tamaño, forma del pico, forma de la cola y marcas características del ave. Con estos cuatro aspectos sabremos diferenciar más del 50% las especies. Estos son los truquillos en los que os podéis ir fijando:

Tamaño

Tamaño y forma del ave. Haz clic en la foto para más detalle.
Las tres aves que hay a continuación presentan, entre otras cosas, un tamaño diferente entre sí. Aparentemente fijarse en esto parece una tontería, porque es evidente que son especies diferentes, atendiendo a su aspecto físico. Pero esto es porque se trata de fotografías, quietas y con luz apropiada. Sin embargo, a la hora de la verdad, a la hora de salir al campo, las aves se mueven, se esconden y se asustan, por lo que es bueno saber más o menos qué son atendiendo a su tamaño corporal.

Pico picapinos (Dendrocopos major) correteando por el tronco de un árbol.
Su tamaño corresponde más o menos con el de un mirlo común.
De estas tres especies es la más grande.
Gorrión común (Passer domesticus) posado sobre una valla.
Su tamaño está por debajo del del mirlo, por lo que es más pequeño que el pico picapinos.
Mosquitero común (Phylloscopus collybita) en la rama de un árbol.
Su tamaño corresponde más o menos con el de un herrerillo.
Es por tanto el más pequeño de estos tres.

Forma del pico

Forma del pico. Haz clic en la foto para más detalle.
Muy asociada al tipo de alimentación que llevan las aves. Hay que pensar que su pico es el cubierto que utilizan para comer, por lo tanto no esperamos que un águila real tenga un pico diminuto, sino uno hecho y preparado para despedazar a sus presas. Las tres especies que hay a continuación presentan, entre otras cosas, una forma de pico diferente entre sí. Fijarse en esto también  puede parecer inútil, sin embargo a veces es la forma de determinar una especie que quede oculta o que no se vea bien. Además nos revela otra información del ave, como es su dieta.

Petirrojo europeo (Erithacus rubecula) en una de las praderas del Retiro.
Su pico es muy fino y alargado para alimentarse de invertebrados.
Cotorra argentina (Myiopsitta monachus) una especie exótica invasora que vive en el Retiro.
Su pico fuerte, hacia abajo y acabado en punta, le permite abrir los duros frutos y piñas de los que se alimenta.
Herrerillo común (Cyanistes caeruleus) muy común en el Retiro.
Un pico pequeño pero fuerte, que le permite una dieta de insectos y semillas.

Forma de la cola

Forma de la cola. Haz clic en la foto para más detalle.

Los tamaños y la forma de las plumas de la cola también dan pistas sobre el nombre del ave, sobretodo en vuelo, cuando las aves están muy lejos o se mueven muy rápido. Las hay largas, las hay redondeadas y las hay con formas únicas, como la de la golondrina o la del abejaruco.

Carbonero común (Parus major) entre las ramas del arbolado del Retiro.
Su cola no tiene una forma peculiar, es más bien cuadrada.
Urraca común (Pica pica) entre los rosales decorativos del Retiro.
La cola de esta especie si es llamativa, larga y terminada en cuña.
Agateador europeo (Carthia brachydactyla) entre la decoración del Retiro.
Su cola en forma de cuña le sirve de apoyo en las ascensiones y descensos por los troncos del Retiro.

Marcas características

Esta es la parte que más problemas causa, pues sirve para diferencias especies dentro de un mismo género, cuando las aves se parecen mucho, las marcas características son atributos o dibujos en el plumaje únicos de esa especie. Un ejemplo claro es el de tres palomas que comparten nicho ecológico en el parque del Retiro, hablamos de la paloma bravía, la torcaz y la zurita.

Paloma bravía (Columba livia) en el tejado de una de las casetas del Retiro.
Las marcas claras son las negras del ala y presentar un iris claramente diferenciado de la pupila.
Paloma torcaz (Columba palumbus) caminando en la pradera del Retiro.
En este caso la torcaz es algo más grande que el resto.
Pero además, hay dos marcas que son únicas en ella, las manchas blancas del cuello.
Paloma zurita (Columba oenas) posada en el tronco de un árbol en el retiro.
El pico parecido al de la torcaz, pero sin un iris diferenciado de la pupila.
Se le ve un ojo más negro y un plumaje más grisáceo, sin marcas llamativas.
En ocasiones hay que tener cuidado y no confundir miembros de la misma especie. Los sexos, la edad o las variaciones en el plumaje son factores que pueden confundir a cualquiera a la hora de determinar una especie.

En cuanto al sexo, muchas aves muestran dimorfismo sexual, lo que se resume en plumajes diferentes entre macho y hembra de la misma especie. A veces es semejante con ligeras variaciones, otras se trata de plumajes evidentemente diferentes. En los dos casos mostrados a continuación se pueden ver macho y hembra de ánade azulón, con plumajes semejantes y macho y hembra de pito real, cuya diferencia reside en el color de una pequeña mancha en la mejilla.

Hembra de ánade azulón (Anas platyrhynchos) en uno de los canales del Retiro.
Su plumaje es completamente diferente al del macho, en ella abundan los tonos pardos.
Macho de ánade azulón (Anas platyrhyncos) en uno de los estanques del Retiro.
Los colores son más diversos que en la hembra, pero ambos son la misma especie.
Hembra de pito real (Picus viridis) en el suelo del Retiro para alimentarse de las hormigas.
La mancha negra de la base del pico es única de las hembras.
Se trata de un detalle en el que prestar atención si se quiere diferenciar la especie bien.
Macho de pito real (Picus viridis) en el suelo del Retiro para alimentarse de las hormigas.
La misma mancha en el caso de los machos es de color rojo llamativo.

La edad también juega malas pasadas a la hora de identificar especies que se parecen mucho. Por ejemplo, los estorninos negros son completamente negros, y los estorninos pintos tienen motitas claras que le hacen parecer una sevillana de color negro. Aparentemente podríamos tener clara cuál es la mancha característica en este caso, las motas claras. Sin embargo, los juveniles del estornino negro presentan motas claras que le harían parecer un estornino pinto:

Hembra delante, juvenil detrás de estornino negro (Sturnus unicolor) en el parque del Retiro.
Si no fuera por el típico pico oscuro del pollo de estornino, podríamos confundirlo con un estornino pinto.
Por último, otro factor que hay que tener en cuenta en este tema de la apariencia física son las variaciones de plumaje. Igual que en humanos hay gente con manchas en la piel o mechas claras en el pelo, en las aves puede ocurrir también y en ocasiones puede dificultar la identificación. Este no es el caso, pero en la imagen de debajo se puede ver un mirlo común macho con un claro indicio de leucismo (partes del plumaje o el plumaje por completo presenta un color blanco).

Macho de mirlo común con leucismo parcial (Turdus merula) en una pradera del Retiro.
Las manchas blancas no son típicas de la especie, esto se trata de una variación genética única.
Ahora que ya tienes o has repasado las nociones básicas, es hora de salir al Retiro a descubrir este lugar donde se esconde una fauna de la que queda mucho por aprender. Si no vives cerca del Retiro, seguro que en las proximidades de tu casa hay un lugar en el que poder salir a ver aves, ya sea un parque o el propio monte. Ten en cuenta que las aves son, en muchos aspectos, bastante desconocidas y que aguardan para sorprenderte en cualquier momento.

No hay comentarios:

Publicar un comentario